Los pilares de la tierra, el musical es un relato ambientado en la Inglaterra del siglo XII, durante la anarquía inglesa. Una obra maestra que entrelaza la vida de Tom Builder, un constructor ambicioso cuyo sueño es construir una catedral gótica en Kingsbridge. Se destaca la lucha por la supervivencia en un período de caos, donde el priorato emerge como un símbolo de estabilidad y ambición arquitectónica en medio del desorden.

La trama se entremezcla con la violencia feudal, los conflictos de poder y las luchas por la supremacía entre nobles, reyes y la Iglesia, desafiando constantemente los sueños de Tom. Amor, muerte, pasiones y ambiciones entrelazadas se despliegan a medida que la construcción de la catedral se convierte en el eje central de la historia.

Los pilares de la tierra, el musical contará con una puesta en escena inmersiva capaz de trasladar al espectador a un viaje épico por la Inglaterra del siglo XII, sumergiéndolos en una historia de ambición, amor y lucha por la grandeza arquitectónica a través de proyecciones 360º y sonido envolvente.

Utiliza herramientas de inteligencia artificial (IA) para convertir el Teatro EDP Gran Vía en un inmenso escenario y situar al espectador en el centro de la acción. El montaje cuenta un equipo de más de 70 personas, entre el elenco, equipo artístico, especialistas de efectos especiales y profesionales de la esgrima, que coreografiarán las escenas de lucha.

La productora ya es conocida por llevar a escena musicales originales y títulos propios de producción 100% española basados en algunos de los libros más vendidos del siglo XX. El musical condensará las más de mil páginas en un espectáculo que representará sobre el escenario la grandeza de una aventura medieval llena de tramas políticas y amores imposibles.

El musical, que cuenta con la producción ejecutiva de Dario Regattieri, tiene un presupuesto de 4 millones de euros. Cuenta con la música de Iván Macías y la letra de Félix Amador quienes nos transportarán a un mundo de reyes, luchas de poder, castillosy grandes pasiones en torno a la construcción de una catedral. Ricardo S. Cuerda es el responsable de la escenografía y Felipe Ramos del diseño de luces.